Los especialistas reconocen el valor de una adecuada
hidratación, recomendando el consumo de agua como un hábito regular. El aporte
adicional de calorías en bebidas e infusiones puede ser un factor de riesgo de
obesidad.
Entre las principales conclusiones de esta
investigación realizada en 1.362 personas se observó que en el grupo de niños
de 3 a 11 años, sólo el 17% de los actos de ingesta de bebidas correspondió al
agua, mientras que un 8% estuvo compuesto por bebidas e infusiones con sabor pero
sin azúcar y el 75% (casi 8 de cada 10 consumos) correspondió a bebidas azucaradas. Es interesante señalar que la
presencia de los padres no modifica la elección de los niños.
Es una pena ver que ha desaparecido la jarra de agua
de las mesas, sobre todo si tenemos en cuenta que los momentos de mayor consumo
de bebidas son el almuerzo y la cena.
Es necesario rescatar el papel que ha tenido siempre
el agua en la mesa acompañando las principales comidas y compartiendo un
espacio propio de las familias en el que se cultivan hábitos saludables.
Motivos para elegir
tipos de bebida
Conocer
más sobre las razones es una manera de ayudarnos a mejorar nuestros hábitos.
Las
motivaciones se agruparon en:
Funcionales:
salud y nutrición, placer, fácil de tomar,
necesidad básica de hidratación y
accesibilidad
Emocionales:
placer individual, placer social.
No
hubo mayores diferencias en las razones ni funcionales ni emocionales por las
que se escoge tomar una bebida con y sin azúcar. Un hábito saludable se inculca
desde la infancia promoviendo entre otras varias conductas la hidratación con
agua dejando para un uso ocasional a las bebidas e infusiones azucaradas.
Tips para padres
·
Incluir
el agua en los encuentros sociales, partiendo de su presencia en la mesa.
Asegúrese de que esté levemente fresca así ofrece mejor sabor.
·
Tenga
en cuenta el aporte calórico de las bebidas azucaradas. Considérelas como una
excepción: trabaje en familia el hábito de tomar agua.
·
Al
elegir otras alternativas de bebidas, que éstas sean sin azúcar o reducidas en
azúcar, pero que la bebida más disponible sea el agua.
·
Estimule
a los niños a elegir agua, transformándolo en un hábito, priorizando los
beneficios que tiene respecto de otras bebidas.
·
Usted
también beba agua, debe pregonar con el ejemplo. Sus hijos no van a elegir agua
si ven a sus padres optar por otras bebidas.
Consejo
Los
especialistas destacan la importancia de rescatar el valor del consumo de agua
desde la infancia y de promover en los niños hábitos saludables, entre los que
se incluye la jarra de agua en la mesa familiar.