miércoles, 30 de diciembre de 2015

PEQUEÑOS PERO UTILES CONSEJOS

Comer rico y cuidar los excesos
Se acercan las fiestas de fin de año, y como costumbre para esta época, se suele tener una variedad de comidas y en mayor cantidad, situación que puede generar cierto temor a subir de peso. En ocasiones, algunos de estos platos tienen un alto contenido de grasa, debido a la manera en que son preparados.
Debemos  aumentar la cantidad de vegetales y legumbres, tendrás una sensación de llenura y podrás alcanzar más fácilmente el equilibrio calórico, que deseas.
En este tema también juega un papel primordial el balance que se haga en las porciones que las personas se sirven,  no se trata de eliminar alimentos o bebidas, de lo que se trata es lograr un balance entre las calorías que ingieres y aquellas que gastas.
Por otro lado, el azúcar y los alimentos dulces se recortan por completo al hablar de dietas o alimentación saludable. Pero esto no es así al igual que todos los alimentos, el azúcar tiene su rol en la nutrición, y mientras sea consumida dentro de los límites adecuados, no tiene que representar un problema.
Podemos disfrutar con confianza de todos los alimentos que haya en las fiestas de fin de año, siempre y cuando los consuma con prudencia.

¿Por qué algunos engordan y otros no?
Hombres y mujeres, jóvenes y adultos, activos y sedentarios. El metabolismo es diferente en cada persona y de él depende nuestra capacidad de perder o ganar peso.
El metabolismo depende de varios factores como el peso, la altura, el sexo, y la edad de las personas, variables que a la vez influyen en la cantidad de músculo que tenga nuestro cuerpo.
La grasa corporal es un órgano frío que como no hace gran cosa, en comparación al músculo, requiere poca energía. El músculo, en cambio, es un órgano caliente (como sugiere el rojo intenso que lo caracteriza, a diferencia del tono blancuzco de la grasa), que tiene más exigencias, requiere más energía y hace que el metabolismo basal sea más alto. Un cuerpo con mayor porcentaje de masa muscular en relación con la cantidad de grasa que tiene, quema más calorías sin moverse que un cuerpo más “fofo”, que tiene más grasa y/o menos masa muscular.
Esto explica por qué a las mujeres les cuesta más bajar de peso que a los hombres. A diferencia de los hombres, ellas acumulan grasa extra en las caderas y cintura que está destinada a funcionar como fuente de energía para el bebé durante el embarazo. Al tener una mayor proporción de grasa que de músculo, su metabolismo es más lento y queman menos calorías.
Hasta los 25 años, una mujer sana tiene hasta un 22% de grasa en su cuerpo. A partir de entonces, el porcentaje sube progresivamente hasta superar el 31% después de los 60. En el hombre, el porcentaje aceptable de grasa pasa de 15% hasta los 25 años a un 23,5% pasado los 60.

El paso de los años
Uno de nuestros grandes problemas a la hora de evitar el sobrepeso es que el cuerpo va perdiendo naturalmente músculo a medida que envejecemos. De la misma manera, con la edad crecen los depósitos de grasa.
Menos músculo y más grasa equivale a un metabolismo menos activo y a un menor gasto de calorías. Éste es un mecanismo de “defensa natural” del cuerpo frente a la falta de comida que heredamos de nuestros antepasados. En el pasado, las personas que envejecían tenían menos posibilidades de procurarse alimento cazando animales, tarea para la que se necesitaba mucha destreza física. Al tener un menor acceso a la comida, el cuerpo de las personas que envejecían debía adaptarse para conservar más energía, es decir, para acumular más grasa. De esta manera, la grasa tenía más utilidad que el músculo a la hora de asegurar la supervivencia.
Si somos sedentarios y ya pasamos los 30 años, nuestro cuerpo empieza silenciosamente a quemar cada vez menos calorías. Por esta razón, aún cuando no aumentamos la cantidad de comida que incorporamos, engordamos casi sin darnos cuenta. La cosa empeora si vamos agregando cositas a nuestra alimentación cotidiana.




lunes, 28 de diciembre de 2015

PANCITA CERVECERA ES UN MITO O UNA REALIDAD

Aunque la minimizamos, la obesidad que se acumula en el abdomen resulta ser la más peligrosa. Es más común en los hombres, que suelen señalar a los brindis como los responsables. Pero, ¿quién tiene la culpa?
Cuando los alimentos o bebidas que ingerimos exceden la cantidad de energía que gastamos, el sistema metabólico se encarga de guardar el combustible sobrante en forma de grasa. Pero nosotros no podemos elegir dónde se depositará esta grasa.
Eso depende de nuestra codificación genética y de otras variables biológicas sobre las que no tenemos control. Esto significa que desde el momento en que nacemos nuestro cuerpo ya tiene designado los lugares donde se ubicará la grasa corporal y la forma que tomará nuestra figura si llegamos a engordar.

En general, al engordar, la mayoría de las mujeres tendrán su depósito de grasa en glúteos y piernas; lo que se conoce como "obesidad en forma de pera".
En cambio, en el hombre la grasa se deposita predominantemente en la panza. Lo que se conoce como "obesidad tipo manzana" u "obesidad abdominal".
La famosa "pancita de cerveza" no es otra cosa que un depósito de grasa. Y la grasa que se deposita allí es la más peligrosa de todas. Imaginemos un terreno en el que los vecinos acumulan basura todos los días y que, por alguna razón, nadie retira. Esa basura continúa acumulándose y con el tiempo se descompone y produce sustancias que se convierten en un caldo de cultivo para toda clase de enfermedades.
Ahora imaginemos que nuestro cuerpo tiene su propio depósito en la zona que está detrás del músculo abdominal. La grasa se acumula allí pero no se queda "tranquila"; libera sustancias dañinas para el cuerpo, que con el tiempo nos pasan factura. El diminutivo de "pancita" no la hace más inofensiva.

Por esta razón, una persona con peso normal pero con un poco de panza puede tener más riesgo que alguien con mucho más sobrepeso o con grasa acumulada en las caderas y la cola. Incluso un sobrepeso moderado de 5 a 10 kilos ubicado "estratégicamente" dentro de la panza  aumenta el riesgo de complicaciones graves entre las que se cuentan daños al funcionamiento del corazón y las arterias. 

Cómo medirte
Para saber si tienes un cuerpo "tipo manzana" simplemente mide tu cintura. Si eres mujer, debería estar tu cintura como máximo en 88 centímetros. Si eres hombre, el máximo debería ser 102 centímetros. Si tu cintura mide más de estas cifras, significa que tienes obesidad abdominal.

Entonces, ¿quién tiene la culpa?
La "panza de cerveza" es un mito. El alcohol no "fija las grasas". La culpa está en lo que comemos, bebemos  y en lo que no hacemos ejercicio.


jueves, 24 de diciembre de 2015

FELIZ NAVIDAD Y UN LINDO AÑO










Un fuerte abrazo por Navidad a todos los que me leen, espero que algo de lo que en este Blog aparece sea útil para Ustedes. Y que el año que ya esta al llegar traiga todos sus sueños
Gladys Ibáñez Dávila
Nutricionista
CNP 3702



miércoles, 23 de diciembre de 2015

COMO REDUCIR LAS CALORIAS SIN CAMBIAR EL MENU DE NOCHEBUENA

Las Fiestas pueden ser la perdición para la balanza. La medida, en todo caso, dependerá de cuánto se coma en exceso, es decir, por arriba de los requerimientos de cada uno y del gasto energético. La regla general es que las personas más activas comen más y mantienen su peso. 
¿Cuántas calorías llevan los platos típicos?
una porción de pavo relleno: 180
una presa de pollo al horno: entre 120 y 150 (depende si es pechuga, muslo)
una porción de lechón: 350
ensalada rusa: 300
ensalada Cesar: 250; o de lechuga, rúcula, tomate, cebolla: 120
100 gramos de frutas secas: 280
una rebanada de pan dulce: 250
una copa de vino: 150
una copa de champagne: 120
un vaso de trago similar: 300
Con una "porción lógica" (la medida con la cual uno se siente satisfecho) de alguna de estas variantes seguramente la aguja de la balanza se mantendrá en su lugar. Aunque existen muchas formas de medirlo, un consejo es elegir un plato mediano con la mitad de la superficie de carne e hidratos y el resto de vegetales (si son crudos, mejor).
¿Qué hacer para no sumar tantas calorías?
Comemos de más cuando lo hacemos por ansiedad, miedo, depresión, tristeza o soledad y también cuando perdemos de vista la organización de la comida.
Tener en cuenta los siguientes  tips ayudará a no perder el control.  
ü  Planificar. Siempre es mejor pensar un menú general, que sea equilibrado y que incluya carnes y vegetales.
ü  Pensar en opciones. Una buena opción es preparar dos tipos de carne (cerdo y pollo) y 2 o 3 guarniciones, preparadas con frutas y verduras.
ü  Incluir frutas en el postre. Esto permitirá no sumar las calorías vacías. La ensalada de frutas con helado, es bienvenida y apta para todas las siluetas.
La expresión "calorías vacías" se emplea en el ámbito de la nutrición. Este concepto se refiere a alimentos que aportan una cantidad importante de energía, pero muy pocos nutrientes o ninguno. Este es el caso de ciertas bebidas o alimentos muy azucarados, harinas o azúcares refinados y alcohol.
Recomendaciones
ü  Elegir dos tipos de dulces para el brindis. Es una buena manera de evitar "picotear" un poco de cada variedad, perdiendo el control de la cantidad de alimentos ingerida.
ü  Calcular la cantidad necesaria para el número de comensales. Es inevitable: cuánto más se prepara, más se come. Esta misma regla también sirve para las bebidas alcohólicas.
ü  Programar algo más que comida. La cena es el pretexto del encuentro. Pero no debería ser el eje. Idear un karaoke, juegos con prendas, o cualquier otra opción llevará a alejar el foco de la comida y a compartir un momento diferente
ü  En nuestra cultura se festeja comiendo. Para salir de esta creencia es importante preguntarnos si realmente necesitamos comida cuanto estamos contentos o si lo que necesitamos es compartir la alegría con otros, comunicarla, exhibirla o simplemente disfrutarla valorando logros.
ü  Si queremos lucir un cuerpo sano y cómodo, el desafío es distinguir el hambre emocional del hambre real. Cuando sentimos hambre es cuando debemos comer, pero si sentimos emociones, ¿por qué las tapamos con la comida? 


lunes, 21 de diciembre de 2015

LA POLEMICA DIETA CON LA QUE MAXIMA BAJÓ 10 KILOS


Máxima Zorreguieta, la mujer que nació en Argentina y hoy reina en Holanda, hizo una dieta que dicen le permitió bajar 10 kilos en seis meses. De la clínica holandesa New Fysic, es un método basado en proteínas que restringe la cantidad de carbohidratos y dulces que se ingieren. Lo complementó con ejercicio aeróbico, como el running y la bicicleta. 

Este plan de alimentación permite comer cinco veces al día pequeñas raciones, para intentar controlar la ansiedad. Contiene galletas de fibras, verduras de hojas verdes, pechugas de pollo, pescados, leche y huevos, además de un complemento de proteínas y aminoácidos. 
Esta dieta, como otras basadas en eliminar los hidratos de carbono, está pensada para producir lo que se llama "cetosis", es decir, al no tener hidratos de carbono para combatir, el cuerpo quema la grasa acumulada. Según se publica, en un documental de la cadena de televisión RTL. 
La Reina Máxima de Holanda cuenta algunos de sus hábitos: "Nado y juego al tenis con las chicas y mis desplazamientos privados en Holanda los hago en bicicleta. Además evito hidratos, grasas y azúcares añadidos. Le doy mucha importancia al desayuno, en el que tomo café, yogur y mucha fruta". 
Opinión de experta Viviana Viviant, licenciada en nutrición, directora de Nutrición y Vida Sana e instructora de fitness, compartió sobre este tipo de dietas y dice que, como la Dieta Atkins que en su momento tuvo un furor muy desafortunado, las dietas sin hidratos de carbono están contraindicadas. "La venden como la panacea y es puro marketing. Es un peligro porque la gente cree que le va a funcionar y lo único que logra es entrar en el ciclo de dieta-atracón-dieta. La verdadera clave pasa por cambiar los hábitos y el estilo de vida". Los hidratos de carbono son sumamente necesarios, el porcentaje de consumo recomendado de las calorías totales diarias es de entre 50% y 60% (aún mayor en deportistas). Debe haber un predominio entre aquellos que se asimilan más lentamente, no elevan en forma brusca el nivel de azúcar en sangre y otorgan saciedad (almidón acompañado de fibra: por ej. arroz y fideos integrales, pan integral o de salvado, legumbres), y una menor proporción de azúcares y dulces. Las frutas y verduras contienen una combinación de hidratos de carbono y es importante incorporar abundantes verduras y, al menos, tres frutas (de distintos colores) por día. 
Las funciones que desempeñan los hidratos de carbono en el organismo: Proveen el combustible necesario para realizar todas las funciones básicas del organismo. Una parte se almacena en el hígado y otra, en los músculos, mientras que el exceso se transforma en grasa. Son el recurso energético exclusivo para el sistema nervioso central (cerebro y médula espinal) y los glóbulos rojos. Ahorro de proteínas: si no se incorporan cantidades adecuadas de hidratos de carbono a diario, se utilizarán las proteínas como fuente energética y, en consecuencia, dejarán de cumplir su función plástica estructural. Para que las grasas se puedan usar normalmente como energía se necesita la presencia de hidratos de carbono. Cuando éstos se restringen mucho, las grasas se metabolizan de modo incompleto, lo que genera productos intermedios llamados cuerpos cetónicos y provocando cetosis, un estado peligroso de acidez orgánica en el que el cuerpo es capaz de quemar grasas fácilmente, incluyendo las reservas propias del individuo, que no es para nada saludable. Se debe comer alimentos variados (de los cinco grupos básicos), si se restringe, no se educa, no generan cambios, producen frustración y efecto rebote. 
Además, para involucrarse correctamente con la pérdida de peso es conveniente no obsesionarse con la balanza: "El peso es secundario en este proceso de aprendizaje y hay que focalizar en el cambio (de conductas, actitudes, creencias). Lleva un poco más de tiempo, pero vale la pena".

viernes, 18 de diciembre de 2015

EL PODER DE LAS INFUSIONES

En la lucha para perder kilos o, simplemente, para mantenernos en forma olvidamos muchas veces la importancia y los beneficios de las infusiones. De hecho, en la mayoría de la dietas se recomienda sustituir el café o los refrescos por una infusión de té verde.
Las infusiones que más te favorecen
El té verde es un fuerte antioxidante que ayuda a eliminar líquidos y controlar la sensación de saciedad. Es aliado del deportista; ya que normaliza los niveles de glucosa en sangre y aporta antioxidantes para reducir el nivel de radicales libres que se produce por el alto consumo de oxígeno cuando realizamos ejercicio. Se recomienda tomar una taza al día.
Otras hierbas tienen grandes propiedades para el sistema digestivo: la manzanilla, el romero, la hierbaluisa o el hinojo, que se toman después de las comidas para ayudar a la digestión. Por otro lado, las infusiones de azahar o tilo son muy relajantes y una taza por la tarde y otra por la noche después de cenar inducen más rápido el sueño. Sin embargo, hay que tener cuidado con infusiones como la de té negro porque, por su alto contenido en taninos, impide la absorción del hierro y está contraindicada para las personas con anemia ferropénica.

Plantas medicinales.
Son especies vegetales que, en su conjunto o con alguna de sus partes (flores, tallo, frutos) ayudan a prevenir y tratar alteraciones de la salud.
Pueden ayudarnos a la pérdida de peso.
Los preparados farmacéuticos de plantas medicinales, junto con la dieta y el ejercicio, pueden ayudarnos a una pérdida moderada y sostenida de peso. Existen diferentes tipos de plantas que se deben tomar de acuerdo a las características de cada persona.
¿Qué otras necesidades pueden tratarse con plantas medicinales?
Por ejemplo: Afecciones leves y moderadas como: problemas digestivos, de insomnio, de cistitis, resfriados, estrés.
Precauciones que debemos tener antes de usar una planta medicinal
Lo primero es acudir a la farmacia y dejarnos asesorar, sobre el preparado fitoterápico más adecuado a nuestras necesidades y características. Si se siguen las indicaciones, podemos estar tranquilos. Lo que no podemos hacer es seguir tratamientos por nuestra cuenta o tratar de adelgazar muy deprisa con sólo plantas.
¿Hay diferencias entre las plantas medicinales de un herbolario y las de  una farmacia?
Las plantas medicinales que se dispensan en la farmacia cuentan con un registro sanitario, un control de todo el proceso de fabricación y dispensación, un prospecto con las indicaciones y el consejo de un profesional sanitario que ha estudiado las plantas medicinales en su carrera. Esos requisitos no son obligatorios fuera de la farmacia.

Infusiones que te ayudan a adelgazar
Cuando decidimos empezar una dieta de adelgazamiento. Lo primero que  debemos saber es que por muchos suplementos o productos que tomemos para adelgazar, no van a servirnos de nada si no llevamos una buena alimentación. Otra cosa es que hagamos una dieta equilibrada, variada y sana y la acompañemos con alguna infusión que nos ayude a eliminar líquidos o a saciarnos.
¿Cuáles son las mejores infusiones para adelgazar?
La mejor forma de adelgazar ya la sabemos es comiendo moderadamente, y haciendo ejercicio. Hay muchos tés que se recomiendan como el té rojo, el té verde estos tés son unos magníficos antioxidantes. Es importante que tomemos los tés media hora después de la comida, ya que de esta forma mejora su digestión.
Pero no solo los tés nos pueden ayudar a adelgazar, existen otro tipo de infusiones también muy eficaces dependiendo de nuestras necesidades.
En caso de retener líquidos, la cola de caballo es una buena opción. Pero si lo que tenemos es mucho apetito, la canela es nuestra infusión; ya que, además de reducir los niveles de azúcar en sangre y acelerar el metabolismo, reduce el apetito. En caso de sufrir ansiedad y necesitar relajarnos, ya sea por la dieta o por cualquier otro motivo, tomar melisa o una valeriana.

No confíes solo en las plantas pon a prueba tu voluntad para bajar de peso.

miércoles, 16 de diciembre de 2015

LOS DIEZ MANDAMIENTOS PARA PERDER PESO

En estas épocas del año empezamos con los planes de adelgazamiento, seguro que hay que perder kilos y lo queremos rápido, las prisas a la hora de adelgazar, son perjudiciales para nuestra salud. Se recomienda que la pérdida de peso sea progresiva, para no sufrir del efecto rebote,
1.- No abandones: Este es sin duda el mandamiento más importante. A la hora de iniciar una dieta de adelgazamiento hay que ser constante, mantener una actitud positiva e incorporar estos hábitos saludables a nuestra dieta cotidiana. El cambio de nuestros hábitos debe ser paulatino, de lo contrario, lo más seguro es que fracasemos en nuestros propósitos.
2.- No te saltes ninguna comida y planifícalas: La planificación garantiza comidas equilibradas y evita caer en opciones improvisadas como platos pre cocinados.
Mantener los  horarios nos ayuda a no sucumbir en el picoteo innecesario y poco saludable. Dejar de comer no nos ayuda a mantener la línea. Se recomienda comer 5 veces al día con especial atención al desayuno, que debe ser el más completo de nuestros platos (con cereales, lácteos y fruta).
3.- Hidrátate: La hidratación es fundamental en cualquier época del año, nos ayuda en el proceso de pérdida de peso, porque del agua depende  el correcto funcionamiento de nuestro organismo y  a la vez  elimina toxinas. Lo ideal es tomar en torno a dos litros de agua, aunque los zumos y las infusiones también suman en una buena hidratación. Lleva una botella de agua siempre y si no te gusta el sabor propio del agua, añádele trozos de frutas que le den un ligero sabor y la hagan más apetecible.
4.- Dedícale tiempo al sueño: Los expertos recomiendan dormir un mínimo de 7 horas diarias. La falta de sueño influye negativamente en el correcto funcionamiento del organismo y, como consecuencia, hará que no consigamos adelgazar e incluso que aumentemos de peso.
5.- Vigila las cantidades: Sobre todo cuando comas fuera de casa. Por muy sano que sea nuestro menú, de nada nos servirá si comemos en cantidades desproporcionadas.
6.- Come siempre en el plato y sentado: Los alimentos hay que saborearlos y disfrutarlos para que a nuestro cerebro le dé tiempo de asimilar que hemos comido y, de esa manera, nos sintamos satisfechos. Comer delante de un aparato electrónico o de pie hace que nos saciemos menos y, por consiguiente, que comamos más de la cuenta o menos saludable.
7.- Los refrescos, mejor light: No, no hace falta que dejes de tomar refrescos o alcohol (aunque deberías limitar su ingesta) pero es mejor si tomas las versiones menos azucaradas y las sin alcohol.
8.- Intenta compensar siempre los excesos: Si un día te pasas o te das un capricho (que no debes privarte, para que tu dieta sea más llevadera) pero eso si al día siguiente compénsalo comiendo más ligero o realizando algún tipo de actividad física.
9.- Y entre horas: Lo mejor es comer algo cada dos horas y de esta forma no sentiremos ese deseo de picoteo, que es otro de los grandes culpables en el aumento de peso. Y, además, no hace falta esperar a tener hambre. Que la comida sea casera y además poco triturada, esto aumenta la masticación y a su vez la saciedad. Algunos ejemplos son: yogur, manzanas o peras con piel cocinada al microondas con trocitos de limón, canela y pasas o cereales de avena con queso fresco.
10.-Muévete: Practica algún tipo de actividad física. Camina a un ritmo movido al menos 30 minutos al día, refréscate en la piscina al mismo tiempo que haces unos largos, apúntate a alguna actividad grupal que te motive o ejercítate desde casa con vídeos.
Si cumples estos diez mandamientos, verás que tu cuerpo te lo agradece, No lo dejes para empezar mañana o el lunes como decimos a veces.
Atrévete, Incluye estos buenos hábitos en tu día a día


lunes, 14 de diciembre de 2015

¿ES EL AGUA MINERAL MÁS SANA QUE LA DEL GRIFO?

Las dos son aptas para el consumo humano, es decir, son potables; pero cada vez son más las personas que optan por el agua embotellada mineral pensando que sus propiedades son mejores. Sin embargo, no siempre es así y escoger entre una u otra dependerá, sobre todo, de si el agua de la zona donde vivimos es de buena calidad
El agua del grifo es una buena opción, solo en zonas donde el agua corriente es muy dura o tiene un sabor desagradable, puede ser recomendable sustituirla por un agua mineral embotellada. Por tanto, debemos saber que el agua del grifo cumple perfectamente con los requisitos de salubridad, está libre de sustancia contaminante si pasa los tratamientos y controles pertinentes para asegurar su potabilidad.
El agua mineral natural se diferencia por sus minerales y oligoelementos, que tienen algunos efectos positivos sobre nuestra salud;  aporta minerales esenciales como el calcio y el magnesio, el bicarbonato, flúor y sodio, por lo que se recomienda a aquellas personas que necesiten dosis extra de calcio: embarazadas, niños en edad de crecimiento, intolerantes a la lactosa, mujeres en edad de menopausia
Beneficios de beber agua mineral natural
La mineralización del agua no es perjudicial para los riñones. No se puede decir que un agua de mineralización muy débil es mejor para la salud que otra con mayor residuo seco (es decir, con mayor cantidad de minerales). La carencia o no de minerales es una característica; simplemente le proporciona al agua su identidad, su gusto particular. Escoger entre una u otra dependerá de si somos deportistas y necesitamos recuperar minerales rápido, si vamos a preparar con ella el biberón del bebé, la mayoría de aguas indican en la etiqueta si son aptas para ello o no, si sufrimos de hipertensión y se nos recomiende tomar un agua con menor contenido en sodio. Por tanto, se recomienda consultar el etiquetado, como haríamos con cualquier otro alimento, para conocer su información nutricional.
El agua mineral natural está exenta de contaminantes y contiene 0% impurezas. Durante todo el proceso de embotellado, desde el momento de su extracción en el manantial hasta su consumo, el agua mineral no puede ser manipulada ni tratada por ningún agente externo. Por tanto, no necesita ningún tratamiento de desinfección ni de filtrado para su consumo.
El sodio (sal) que contiene el agua mineral no constituye un riesgo para la salud. Beber dos litros diarios de agua mineral natural proporcionaría 40 mg (equivalentes a 0,1 g de sal), que representan únicamente el 2% de la ingesta diaria de sodio máxima recomendada dentro de una dieta equilibrada por la Organización Mundial de la salud. En cualquier caso, para personas con hipertensión o que deben tomar una dieta pobre en sodio, se recomienda elegir un agua mineral con un contenido menor a 20 mg que son la mayoría de las que encontramos en el mercado. Además, no hay que olvidar que la fuente principal de sal son los alimentos preparados y las comidas demasiado condimentadas.
En cualquier caso, ya sea agua mineral o del grifo, en lo que todos los expertos coinciden es que debemos beber al menos dos litros de líquidos al día de media. Los expertos insisten en la importancia de una hidratación saludable para evitar consecuencias relacionadas con la deshidratación, como son la fatiga, la falta de atención, los problemas cognitivos o la disminución de la memoria.


viernes, 11 de diciembre de 2015

OBJETIVOS PARA ESTA NAVIDAD

Saca de tu vocabulario la palabra dieta. Si queremos recuperar rápido  nuestro peso ideal, debemos empezar desde ahora a seguir una alimentación equilibrada y variada sin renunciar a ningún nutriente esencial para el organismo. Otro consejo  para ayudar al metabolismo a funcionar mejor, es dejar un espacio entre ingestas de 2,5 a 4 horas. De esta manera, estaremos saciadas todo el día así no llegaremos a las comidas con sensación de hambre. Y llegaremos a la Navidad que es nuestro objetivo, con algún kilo de menos y mejor aún con algún buen hábito de más.
Tomar hidratos de carbono en el desayuno y en el almuerzo. La falsa creencia de que los carbohidratos predisponen al sobrepeso, ha hecho que muchas personas eliminen este grupo alimentario de sus comidas diarias. Otra cosa diferente es conocer cuándo debemos consumirlos y elegir aquellos más bajos en índice glucémico. Siempre será mejor ingerirlos antes de realizar el ejercicio más intenso del día o en el desayuno en forma de pan o cereales integrales para disponer de la energía necesaria de la mañana. Por la noche, sin embargo, la ingesta de hidratos, proteínas y grasas debe ser menor porque en las siguientes horas no vamos a tener una actividad desgastante.
Cómo debe ser la cena. Tomar verduras cocinadas mejor que crudas para facilitar la digestión y mejor pescados que carne; ya que es rico en ácidos grasos beneficiosos para el corazón. Si se prefiere carne, es mejor elegir la de ave. Una o dos veces por semana, también podemos tomar semillas como los cereales, el arroz integral y las legumbres.
Masticar bien los alimentos. Nos va a ayudar a hacer mejor la digestión de los alimentos. Además, al comer deprisa se ingiere más cantidad de la que se necesita y la sensación de saciedad tarda más tiempo en aparecer.
Bebe mucho líquido entre comidas. En personas adultas sanas se recomienda beber agua entre 1,5 litros y 2 litros al día. Si además, practicamos ejercicio o estamos sometidos a temperaturas elevadas, se deberá incrementar.
No acostarse nada más terminar de cenar. Como mínimo hay que esperar dos horas, pues es recomendable realizar la digestión antes de acostarse.
40 minutos de ejercicio cardiovascular varias veces por semana. Puede ser desde correr hasta andar a buen ritmo, hacer bicicleta. De esta manera, ayudaremos al cuerpo a quemar grasa.

Cuidado con los 'caza dietas'
Cuando se trata de perder unos kilos, algunas mujeres caen en un estado tal de desesperación que las lleva a creer a pies juntillas en cualquier solución que puedan ofrecerles las mil y una dietas milagro que pululan por la red. Sobra decir el peligro que esto conlleva para nuestra salud.
Las dietas milagro no funcionan y de que la única alternativa buena es la de comer de manera sana y equilibrada. El problema es siempre el mismo: la falta de constancia.
Saben que no son constantes y por eso buscan usar cualquier dieta rápida, el milagro que esperan para adelgazar sin esfuerzo. Pero jamás las verán haciendo ejercicio. Evidentemente, este tipo de comportamiento es bastante insensato, pues no es conveniente usar nuestro cuerpo como instrumento para contrastar cada una de las dietas.





miércoles, 9 de diciembre de 2015

INTOXICACION ALIMENTARIA

Cada año, 600 millones de personas sufren una intoxicación alimentaria. Unas 420.000 personas, mueren cada año en el planeta a causa de enfermedades transmitidas por alimentos insalubres, un tercio de ellas menores de cinco años según el primer estudio sobre este tema elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El informe, es el resultado de ocho años de trabajo de más de 150 científicos de todo el mundo que trataron de determinar la repercusión de la ingestión de alimentos insanos en la morbilidad y mortalidad de la población.
De los más de 200 agentes que pueden provocar intoxicaciones alimentarias, la OMS sólo logró estudiar en profundidad los efectos de 31 elementos (entre ellos bacterias, virus, parásitos, toxinas y químicos), dado que del resto no se cuenta con información suficiente o concluyente a nivel mundial.
Una contaminación alimenticia puede causar síntomas a corto plazo, pero también originar enfermedades graves a largo plazo como cáncer, fallos renales, dolencias hepáticas y desórdenes neuronales.
Los niños que sobreviven a las formas más graves de intoxicación alimenticia puede sufrir retraso en su desarrollo físico y mental.
Estas enfermedades graves afectan especialmente no sólo a los niños, sino también a mujeres embarazadas, ancianos y personas con sistemas inmunitarios débiles.
El riesgo de las enfermedades relacionadas con la comida insalubre es mucho mayor en países en desarrollo, dado que su aparición está íntimamente ligada con la preparación de alimentos con agua contaminada, con la falta de higiene y con las condiciones inadecuadas de almacenamiento.
De hecho, las dos regiones más afectadas son África, con 91 millones de enfermos y 137.000 muertos anuales y el Sudeste Asiático con 150 millones de casos y 175.000 muertes.
En la región de las Américas, 77 millones de personas enferman anualmente por una intoxicación alimenticia, de las cuales se estima que 9.000 mueren.
De los que enferman en la región de las Américas, 31 millones son niños menores de cinco años, de los cuales 2.000 fallecen.
El principal causante de estas dolencias y decesos es la diarrea.
Uno de los principales focos de contaminación es la llamada aflatoxina, que aparece en comida infectada con moho y que es ingerida por personas que cuentan con esa comida como  única fuente de alimento.
Es por ello que los especialistas de la OMS abogan por fomentar la relación entre la salud y la agricultura para lograr obtener seguridad alimentaria doble, es decir acceso a alimentos pero que éstos sean seguros para ser ingeridos.
En general, los principales agentes de la intoxicación alimentaria son las bacterias de la listeria, de la Brucella y del cólera; el virus de la hepatitis A; los parásitos de la toxoplasmosis, de la tenia solium, del echinococcus, o del clonorchis sinensis; y el cianuro.

Empieza el verano y con la época se inician también los cuadros de intoxicación alimentaria, por la mala cocción de algunos alimentos, o la falta de higiene al prepararlos o también la contaminación cruzada  este es un proceso por el cual los alimentos entran en contacto con sustancias ajenas, generalmente nocivas para la salud. Un ejemplo típico de contaminación cruzada es el contacto de la sangre de la carne con alimentos cocidos. 

lunes, 7 de diciembre de 2015

EL LIBRO BLANCO DE LA NUTRICION INFANTIL EN ESPAÑA

La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que seis de los siete factores determinantes de la salud están ligados a la alimentación y la actividad física. Los primeros años de nuestra vida marcarán en gran parte nuestros hábitos de alimentación y las enfermedades que podríamos padecer en la edad adulta. De hecho, algunos estudios han apuntado en los últimos años que la nutrición pre y posnatal condiciona la salud a largo plazo y el riesgo de padecer determinadas patologías como puede ser la obesidad, el asma o la hipertensión.  
Estos son algunos de los datos que recoge el primer Libro Blanco de la Nutrición Infantil en España, que se ha presentado este jueves en Barcelona. La publicación, impulsada por la Cátedra Ordesa de Nutrición Infantil, conjuntamente con la Asociación Española de Pediatría (AEP), la Fundación Española de Nutrición (FEN) y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), hace un análisis  global de la nutrición infantil, recoge los principales datos, sugiere recomendaciones y propone retos a abordar en el futuro.  
La prevalencia de la obesidad infantil y juvenil en España sigue siendo alarmante y plantea un grave problema de salud, que conlleva un aumento en el riesgo de padecer enfermedades crónicas.
La alimentación infantil en España se aleja del patrón de dieta mediterránea y recibe una clara influencia del modelo occidentalizado. Un tipo de dieta que podría estar claramente relacionada con la aparición de la obesidad por ser inadecuada y de baja calidad.
La alimentación del niño hasta los 3 años es clave para su salud nutricional, además es la etapa en la cual se empiezan a establecer los hábitos alimentarios que mantendrá durante su infancia y que garantizarán un crecimiento y desarrollo adecuados.
La alimentación complementaria debe introducirse hacía los 6 meses. Según los autores del Libro Blanco de la Nutrición Infantil en España es necesario mejorar la prevención y detección de la malnutrición y corregir sus principales causas. Es importante aprender de lo ocurrido durante la crisis económica  para poder realizar los cambios necesarios y no repetir la situación vivida. Además plantean a los Gobiernos la revisión de los criterios de aplicación de la renta mínima de inserción, aumentar las becas comedor y las ayudas económicas o de alimentos que reciben las familias necesitadas.
Las farmacias españolas ofrecen cada año unos 20 millones de consejos relativos a nutrición y semanalmente realizan 367.000 controles de peso y talla en bebés. Por su cercanía a la población, los farmacéuticos se convierten en agentes del sistema de salud claves para el asesoramiento nutricional de la población y grandes promotores de hábitos saludables. En este sentido, ya se han impulsado diferentes campañas educativas con escolares españoles, como el programa Plenúfar o Desayuno Saludables.
Más de un centenar de prestigiosos autores de diversas procedencias y especialidades han llevado a cabo, por primera vez, esta recopilación de todo el conocimiento sobre el estado actual de la alimentación infantil en España, recogiendo de manera integrada las debilidades y fortalezas, así como las oportunidades y retos a los que debemos enfrentarnos en el presente y en el futuro.  
El libro se divide en diversos módulos que abordan todos y cada uno de los aspectos relacionados con la nutrición infantil, desde el embarazo, la lactancia materna, la alimentación del niño sano hasta el abordaje de la prevención y tratamiento de las enfermedades, así como la investigación en alimentación infantil.
Se trata de una publicación de consulta que puede aportar información útil a profesionales sanitarios, que desarrollan su labor en el ámbito de la nutrición; educadores; administraciones encargadas de las políticas de prevención y promoción de la salud de la infancia y la adolescencia; estudiantes y ciudadanos.  
El siglo XXI tiene como gran reto dejar de curar por haber conseguido prevenir la mayoría de las enfermedades. En los primeros años de vida, los patrones alimentarios familiares ejercen una gran influencia en los hábitos del niño y suelen tener efectos duraderos que influirán positiva o negativamente,  en su salud a corto, medio y largo plazo. La presentación se enmarca dentro de la III Jornada Científica de la Cátedra Ordesa de Nutrición Infantil, creada por Laboratorios Ordesa y ubicada en la Universidad de Zaragoza con la participación también de la Universidad de Cantabria.


viernes, 4 de diciembre de 2015

NOS PREGUNTAS…..TE CONTESTAMOS

¿Cuáles son los métodos más seguros para cocinar la carne?
Cocinar a altas temperaturas o con la comida en contacto directo con una llama o una superficie caliente, como la parrilla o a la  sartén, produce más de ciertos tipos de químicos cancerígenos (como los hidrocarburos aromáticos poli cíclicos y las aminas aromáticas heterocíclicas). Sin embargo, no hay suficientes datos para que el Grupo de Trabajo del CIIC llegara a una conclusión sobre si el modo en que la carne es cocinada afecta el riesgo de cáncer.

¿Cuántos estudios se evaluaron?
El Grupo de Trabajo del Centro de Internacional de Investigación sobre el Cáncer (CIIC) consideró más de 800 estudios diferentes sobre el cáncer en los seres humanos (algunos estudios proporcionaron datos sobre los dos tipos de carne; en total más de 700 estudios epidemiológicos proporcionaron datos sobre la carne roja y más de 400 sobre carne procesada).

¿Cuántos expertos participaron en la evaluación?
El Grupo de Trabajo del Centro de Internacional de Investigación sobre el Cáncer (CIIC), fue conformado por 22 expertos procedentes de 10 países.

¿Por qué el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) eligió para evaluar la carne roja y la carne procesada?
Un comité asesor internacional que se reunió en 2014 recomendó que la carne roja y la carne procesada fueran consideradas de alta prioridad para su evaluación por el Programa de Monografías del CIIC. Esta recomendación se basó en estudios epidemiológicos que sugerían que los pequeños aumentos en el riesgo de varios tipos de cáncer podían estar asociados con un alto consumo de carne roja o de carne procesada.
Aunque estos riesgos son pequeños, para la salud pública podrían ser importantes dado que muchas personas en el mundo comen carne y el consumo de carne está aumentando en los países de ingresos bajos y medianos. Pese a que algunas agencias de salud ya recomiendan limitar la ingesta de carne, estas recomendaciones están dirigidas principalmente a reducir el riesgo de otras enfermedades. Con esto en mente, es importante para el CIIC proporcionar evidencia científica autorizada sobre los riesgos de cáncer asociados con el consumo de carne roja y de carne procesada.

¿Se puede comparar el riesgo de comer carne roja con el riesgo de comer carne procesada?
El anuncio de la OMS ha dado mucho que hablar. Según el estudio de estos expertos, "cada porción de 50 gramos de carne procesada consumida diariamente aumenta el riesgo de cáncer colorrectal en un 18%".
Estos hallazgos apoyan aún más las actuales recomendaciones de salud pública acerca de limitar el consumo de carne. Y al mismo tiempo matiza: "La carne roja tiene un valor nutricional”. Por lo tanto, estos resultados son importantes para permitir a los gobiernos y a las agencias reguladoras internacionales realizar evaluaciones de riesgo, a fin de equilibrar los riesgos y beneficios de consumir carne roja y carne procesada, y poder brindar las mejores recomendaciones dietéticas posibles.
Y es que si nos paramos a pensar, en realidad, el informe no hace más que apoyar algo que vienen defendiendo la mayoría de los expertos en nutrición, es decir, que en general, consumimos demasiada carne y debemos introducir en nuestra dieta más frutas, verduras y pescado para poder llevar una alimentación equilibrada y sin riesgos para nuestra salud.
Según el informe de la OMS consumir en exceso carne roja o carne procesada conlleva el riesgo de padecer cáncer colorrectal, ¿hasta qué punto esto es cierto?
Efectivamente, el consumo EXCESIVO de carne roja en la dieta puede provocar cáncer de colon, pero no supone el único factor, debe haber una predisposición genética y, además, una mala alimentación en general, deficitaria en frutas y verduras y alta en alimentos ricos en grasas.


miércoles, 2 de diciembre de 2015

PEQUEÑOS, PERO UTILES CONSEJOS

Qué comer antes, durante y después de una maratón
Los carbohidratos brindarán la energía adicional necesaria para correr una maratón lo más importante es que nuestro cuerpo almacene energía, como carbohidratos de fácil digestión, es decir las pastas, el yogurt y las avenas.
Es necesario ingerir carbohidratos dos o tres horas antes de empezar la carrera. Una taza de leche con cereal, avena, una tostada con miel, rehidratantes y líquidos, que nos da un aporte energético importante. Previo a empezar la carrera, pueden comer una barra de cereal o yogurt con cereal. La noche antes de la maratón, es importante consumir una buena cantidad de carbohidratos, por ejemplo cenar fideos con media lata de atún, panes integrales, y abundante líquido.
Nuestro organismo está habilitado para realizar ejercicios por ochenta o noventa minutos, pero al participar en una maratón el esfuerzo es mayor por lo que se debe consumir calorías extras.
Para estas carreras necesitamos energía adicional y  el organismo se manejará bien y se pueda llegar a la meta. Se puede subir 2 o 3 kilos antes de la maratón consumiendo carbohidratos, pero estos kilos se bajarán durante la competencia.
Al sudar nuestro cuerpo pierde sodio, potasio y electrolitos, que podemos recuperar con un caldo de pollo, o un jugo de fruta fresca y un sándwich con pan integral, jamón y queso.
Hacer ejercicio con el estómago vacío, podría traer complicaciones como hipoglucemia, es decir, sudor frío, ansiedad, languidez, temblor, hasta desmayos que
Podrían llegar a un estado de coma cerebral.

Las calabazas
Desde un punto de vista nutricional se puede destacar que aportan calcio en cantidad significativa y que es un alimento que ayuda a mantener los niveles de glucosa en sangre estables. Además aporta un dulzor natural que se puede aprovechar para la preparación de algunos postres.
Son muy fáciles de preparar y es que con ellas se pueden hacer infinidad de recetas, tanto dulces como saladas. Tanto si eres una persona muy deportista como si eres una persona sedentaria, es un alimento recomendable, siempre con matices claro está pero debes incluir este alimento en tus menús semanales.

Ensaladas para el verano
Durante los meses del verano cambia mucho nuestra forma de vivir, tratamos de pasar la máxima cantidad de tiempo posible fuera de la casa. Desde irnos de caminata con los niños, hacer las compras en los mercados al aire libre, y por supuesto cocinar a la parrilla que dentro de la casa, y aprovechar la ocasión para comer en el patio al aire libre. Esta es la época propicia para las ensaladas, aunque todo el año son buenas en esta época nos apetecen más. Algunas ideas para hacer este verano:
Paltas  rellenas con atún: Paltas, arvejas, maíz, zanahoria, huevo duro, tomate, perejil y salsa rosada.
Ensalada de choclos papas y brócoli: Choclo, papas, brócoli, y cebolla con aderezo de mayonesa, ajo, limón y culantro
Ensalada de espinacas, frambuesas gorgonzola y nueces: Ensalada con contrastes de sabores, preparada con espinacas, frambuesas, queso gorgonzola y nueces caramelizadas.
Ensalada de papas con camarones: Esta ensalada de papas lleva camarones, zanahoria, cebolla blanca, mayonesa, ajo y perejil.
Ensalada de pepino: Fácil, preparada con rodajas de pepino y cebollas marinadas con aderezo de limón y culantro.
Ensalada con limón y culantro: Lleva lechuga, tomate, cebolla y palta y un refrescante aderezo de limón y culantro.

lunes, 30 de noviembre de 2015

DIVERTICULOSIS

También llamada enfermedad diverticular del colon, es la formación abundante de divertículos o pequeñas bolsas, en la pared intestinal que se desarrolla generalmente en el intestino grueso
A este cuadro, se suma el engrosamiento de las capas musculares y estrechamiento de la luz intestinal. Por lo general, afecta a hombres mayores de 50 años. Existe una incidencia mayor al 75% en las personas mayores de 80 años.
La mayoría de las personas con diverticulosis, no presenta síntomas. Sin embargo algunos pueden presentar dolor o malestar, especialmente en la zona abdominal inferior, hinchazón y constipación. Si en los divertículos quedan restos de heces, se produce una inflamación de los mismos, lo que se conoce como diverticulitis.
DIVERTICULITIS
Es una complicación muy grave de la diverticulosis que debe ser tratada de manera hospitalaria, llegando en muchas ocasiones a la intervención quirúrgica. Existe dolor abdominal agudo. El dolor es severo y aparece de repente. A veces puede comenzar levemente e ir aumentando con los días. Las personas con diverticulitis también pueden tener náuseas, vómitos, fiebre, obstrucción intestinal y sangrado en el recto. Cuando existe diverticulitis, debe haber  una privación completa de alimentos líquidos y sólidos para evitar que el proceso digestivo se inicie. La dieta dura unas horas y es utilizada para realizar ciertas pruebas de diagnóstico.
Recomendaciones nutricionales:
Para casos de diverticulosis sin dolor: se debe optar por un régimen estimulante intestinal: La razón de su aplicación es la estimulación del peristaltismo, la aceleración del tránsito intestinal y regularizar la flora intestinal. Se basa en alimentos que provoquen estímulos intestinales: Leche descremada y fría.  Huevos en cualquier forma.  Carnes de cualquier tipo.  Hortalizas preferentemente las de hojas y en lo posible crudas. Fruta cruda, entera y con cáscara. Cereales integrales. Aceites crudos.  Azucares comunes.  Ingesta diaria de 2 a 3 litros de bebida sobre todo infusiones.
Se deben evitar: Quesos duros, frutas como plátano, manzana, membrillo, Panes blancos, Te.
Para casos de diverticulosis con dolor: se debe optar por un régimen estimulante intestinal moderado: En este tipo de patologías se presentan cambios anatómicos en el intestino, y suele ser común en los ancianos. La misma no debe estimular en forma excesiva al intestino, ya que empeoraría la situación. Por tanto se basa en estímulos suaves que disminuyan el dolor. Se sugiere que la alimentación diaria se fraccione en 4 a 6 comidas, que la temperatura de los alimentos sea templada y que se incluya cantidad adecuada de grasas en cada comida.
Alimentos permitidos: Leche sin lactosa. Yogur descremado, Huevos cocidos. Carnes blancas sin piel y como segunda instancia rojas magras. Hortalizas: zanahoria, calabazas cocidas. Frutas: manzana, pera, plátano, melón, cerezas. Cereales: féculas y harinas finas, Pan: blanco y bajo en fibra  Dulces: Jaleas y gelatinas. Aceites: crudos como condimento
Infusiones: te de color claro y tisanas. Bebidas: agua mineral o natural, y jugos o caldos de frutas permitidas. En esta dieta, se sugiere ingerir más de 3 litros de líquido por día. Condimentos suaves y hierbas aromáticas.
Se deben evitar: Lactosa, bebidas y productos fríos o helados y las fibras crudas. Leche común. Frutas secas, Bebidas gaseosas,  café, y alcohólicas, 
DIVERTICULOSIS
Los alimentos que  reducen el riesgo de padecer de divertículos, o si ya están formados, evitan que aumenten son:
Alimentos que debemos aumentar en  la ingesta: Fibra: siempre que tomemos alimentos ricos en fibra, el riesgo de padecer divertículos es menor. La fibra al no absorberse, permanece en el intestino reteniendo agua. Como resultado, las heces se tornan más blandas y voluminosas, facilitando su tránsito. Agua: es tan importante como la fibra. Debemos beber alrededor de 8 vasos diarios de agua para evitar que las heces se resequen. Fruta: todas son fuente de fibra soluble, por tanto ablandan las heces facilitando el tránsito intestinal. Verduras, Legumbres,
Cereales integrales. La avena es el cereal más protector y suavizante del intestino.
Alimentos que debemos reducir o eliminar: Grasas duplica el riesgo de padecer diverticulosis, carnes, pan blanco, chocolate

Si tenemos en cuenta que una correcta selección de alimentos reduce o disminuye el riesgo de padecer divertículos, seremos más conscientes a la hora de elegir que alimentos nos benefician. Aunque lo cierto es que nunca desaparecen.